Un imponente conjunto de obras de artistas nacionales, entre los que están León Ferrari, Marta Minujín, Leandro Erlich, Lucio Fontana, Alberto Greco o Graciela Sacco, entre muchos otros, se presenta bajo el título «Argentina. Lo que la noche le cuenta al día», en el Padiglione d’Arte Contemporanea (PAC) de la ciudad italiana de Milán, una exposición que inaugura el próximo lunes con el despliegue en sala de la performance «Mundo de mierda» dirigida por la coreógrafa Mariana Bellotto y el Grupo Performático Sur.
Curada por el argentino Andrés Duprat y el italiano Diego Sileo, que dirige el PAC de Milán, la muestra toma su título de la novela homónima de otro argentino, Héctor Bianciotti (1930-2012) para reunir algunas de las obras más importantes de arte argentino de los últimos 50 años, vinculadas a diversas formas y expresiones de la violencia, temática que hilvana el proyecto.
En este contexto, la exposición quedará formalmente inaugurada con una performance dirigida por la coreógrafa Mariana Bellotto, que se desplegará en las salas del museo italiano que albergará esculturas, instalaciones, fotografías y videos de los últimos 50 años, de más de 20 artistas, donde destacan piezas como «La civilización occidental y cristiana» de León Ferrari, «El Partenón de libros prohibidos» de Marta Minujín o «Maresca se entrega todo destino» de Liliana Maresca, que en todos los casos representan hitos de la historiografía local.
El cuerpo como vehículo crítico y político es el foco principal en las performances de Bellotto: en sus trabajos utiliza un lenguaje híbrido que conjuga danza, performance, dramaturgia y medios audiovisuales en múltiples formatos y soportes con marcado carácter interdisciplinario.
La performance que dará por inaugurada la muestra «Argentina…», reúne una serie de bailarines en escena que, entre video performances, luces y música, se vinculan e interactúan con unos inmensos bloques de hielo, en un mundo inventado, fantástico y extremo que moja, quema y arde.
«Es una obra que tiene diferentes expresiones. Ya la estuvimos presentado hace dos meses en el Museo Regional Aníbal Cambas de Posadas con seis bailarines y lo que vamos a hacer en la apertura de la muestra en el PAC de Milán es una adaptación, site specific, con carácter de estreno, con tres de esos bailarines muy acostumbrados a abordar el cuerpo performático», cuenta a Télam la directora, coreógrafa y performer Mariana Bellotto, cuya obra «Trilogía Pandémica» (2021) también será parte de la exposición.
La puesta propone un recorte del mundo que no es la Antártida ni Islandia pero sí un espacio gélido y blanco, donde sus habitantes -los performers- se vinculan indisolublemente al destino de las inmensas barras de hielo en una experiencia sensorial extrema que evidencia el paso del tiempo, en cada mojadura o en cada ardor. A lo largo de la obra, los performers van pasando de la manipulación cuidada en el comienzo, a sostener el objeto entre las manos, entre las piernas, abrazar los trozos de agua con los cuerpos, colocarlo dentro de la ropa, hasta transformarse en parte del paisaje.
«Mundo de mierda es una obra muy extrema para los performers. Los bailarines hacen un despliegue físico increíble. El trabajo tiene que ver con el tiempo que se desgrana en escena, la idea de los objetos que dejan de ser tales y se transforman, la pérdida, el paso del tiempo y también el mundo actual. Resuena muchísimo todo lo que tenga que ver con el calentamiento global», asegura la coreógrafa que ha creado más de 30 obras, entre performances, instalaciones site specific y videos.
Para Bellotto, cada pieza arranca primero como una investigación del cuerpo, que demanda entrenamiento y concentración, y en ese proceso, en ese devenir de la experimentación «se producen construcciones dramáticas». «En su acercamiento al hielo, los performers van generando diferentes situaciones que construyen una narrativa. Para mí el texto y la voz también es movimiento y entonces yo siempre integro las voces, la música, la sonoridad de los cuerpos y los textos en escena», describe Bellotto (1963) , la fundadora y directora del Grupo Performático Sur (GPS) con quienes desarrolla distintos proyectos poéticos.
Desde hace más de tres décadas, Bellotto viene desarrollando un prolífico y original trabajo autoral de creación coreográfica, desde los años 80 en que formó parte del Grupo de Danza Teatro de la Universidad de Buenos Aires, pasando por sus presentaciones en el Centre National de la Danse de París o el Festival de Danza de Busan (Corea del Sur), hasta el presente, al frente del GPS, con el que se han presentado en espacios como la Bienal de Performance o el Centro de Experimentación del Teatro Colón.
– ¿Cómo nació «Mundo de mierda»?
– Hace muchos años, en 2009 o 2010, hice un trabajo de coautoría con una coreografía coreana en donde combinamos gente de su compañía, con gente de la mía, e hicimos un intercambio increíble, hermoso. Ellos estuvieron en Buenos Aires en un verano y lo primero que hicimos fue ir a ver el taller de León Ferrari, aún vivía, éramos amigos y estuvimos ahí con él. Cuando salimos de ahí hacía mucho calor y fueron unos días de creación en donde empezamos a trabajar con la inspiración de ese universo, de su taller y de todo lo que vimos y hablamos con él. Hacía mucho calor y entonces un día yo hice unos ladrillos de hielo y los introduje en el ensayo. Y ahí empezamos a trabajar con hielos pero una cosa mucho más acotada. Entonces en el verano, con el grupo de artistas que dirijo, Grupo Performático Sur, retomamos el año de trabajo y empezamos a trabajar con la idea de los cuerpos en las protestas. Y era un verano muy caliente, todo lo que hacía costaba mucho esfuerzo y un día traje esos ladrillos de hielo tan hermosos y los introduje. Por supuesto al principio fue todo tímido. Imagínate que el hielo te marca el cuerpo, te quema, duele, arde y al mismo tiempo también va produciendo una dramaturgia loca en la misma investigación. Y entonces empezamos a trabajar como muy de a poco y en un momento les dije: «Quisiera construir un mundo en donde ustedes se puedan meter y como si fueran unos habitantes de ese mundo en donde el hielo puede ser la nada misma que se desgrana, pero al mismo tiempo puede ser todo, el deseo, el contacto, el objeto preciado». Y a ellos les pareció fantástico. Es verdad que hubo un momento en donde se padeció, también. Fue muy demandante para los performers. Y adquirieron una gran fortaleza física.
– Es literalmente poner el cuerpo…
– Para mí, siempre el motor es el cuerpo. En este momento, el cuerpo tiene un valor extraordinario en el arte y lo que yo intento es darle brillo y sentido a ese cuerpo, con todo lo que nos implica en el devenir contemporáneo. Y también con todo el sentido de la observación, las capturas de imágenes, el cuerpo observado, el cuerpo manipulado desde la tecnología, la relacion del cuerpo con el mundo objetual, siempre con un tinte muy sudaca, porque también yo reivindico eso, en el sentido del Arte Povera, en un sentido poético. Mi motor es el cuerpo humano siempre pero en este momento creo que más que nunca. Esta idea del cuerpo humano como un resorte fuertísimo para el arte en estos momentos, en la performance, desde la danza.
Con la actuación de Catalina Jure, Ludmila Mazzucchelli, Jorge Yañez y la música de Ramiro Mansilla Pons, «Mundo de mierda» será la performance inaugural de la exhibición que recibirá el PAC de Milán y que oficiará de vidriera en Europa para un imponente conjunto de artistas de Argentina, abierta al público del 21 de noviembre al 11 de febrero de 2024.
La muestra estará abierta al público del 21 de noviembre al 11 de febrero de 2024.