La Secretaria de Desarrollo Social de la Municipalidad de Villa Regina Luisa Ibarra expresó que el proyecto mediante el cual se destinarán las instalaciones del Hogar La Esperanza a un espacio para las mujeres en situación de vulnerabilidad “es una reconversión y no significa que se abandona al adulto mayor”.“Para llegar a esta decisión hubo un trabajo pensado, analizado y documentado. Lo que se hizo fue brindarles un espacio a las mujeres que no estaban contempladas en ningún lugar y que sufren violencia y demás vulnerabilidades, además de otorgarles un sitio donde se puedan capacitar para una salida laboral”, agregó Ibarra.Explicó: “Analizamos que el Hogar Juan Pablo II está destinado a los adultos mayores varones, ediliciamente preparado, que es un lugar amplio, en condiciones, con el personal que corresponde, que depende de la Municipalidad y que tiene a disposición 20 plazas de las cuales sólo 10 estaban ocupadas. Entonces vimos que tanto Juan Pablo II y ‘La Esperanza’ estaban dando respuesta a una sola problemática, es decir, adultos mayores hombres. Por eso decimos que no es un cierre, es reconvertir ‘La Esperanza’ para también darle un espacio a la mujer, a las adultas mayores y a las adolescentes en situación de vulnerabilidad”.“Siempre se actuó respetando la autonomía y la voluntad propia de las personas y rigiéndonos por lo que dice la Ley para que el adulto mayor viva en su ámbito familiar y que tengan su propio lugar de residencia ya que la institucionalización es el último recurso”, concluyó Ibarra.